Artículo de opinión, Consejos literarios, Mundo editorial

Guía para publicar tu novela (XI) - La sinopsis argumental

En los dos últimos artículos hemos hablado de la sinopsis tradicional, que como decía es una síntesis muy básica y breve para atraer al lector (o, en nuestro caso, al editor). Pero hay otro tipo de sinopsis, más específica y extensa, que se centra en el aspecto argumental de la obra, y con sus propias particularidades. Vamos a explicarlas un poco.

La sinopsis argumental es muy habitual en el ámbito cinematográfico, donde los guionistas lo utilizan para sintetizar la trama del proyecto (con mucho más detalle que la simple story line). Pero en el mundo editorial también existe esta herramienta, que no es ni más ni menos que un resumen del argumento de la obra. Si en la sinopsis habitual debíamos ceñirnos a mostrar emociones, a transmitir el mensaje, en la sinopsis argumental debemos ser más precisos. Tenemos que incluir la información básica del desarrollo de la trama, esto es, la secuencia de acontecimientos. Podríamos decir que la sinopsis común es una primera aproximación, una declaración de intenciones, y la sinopsis argumental es una presentación en toda regla.

Una sinopsis argumental debe tener una extensión entre dos y tres páginas. En ese espacio debes ser capaz de sintetizar el argumento de la novela y el “cómo-cuándo-dónde” en que se desarrolla: debes narrar el “viaje” de los personajes, lo que va viviendo, lo que ocurre a lo largo de la obra, y ofrecer así una perspectiva general y completa (aunque sin entrar en aspectos de técnica literaria, para eso el editor tendrá que leer la novela). En ese sentido, debemos huir una vez más de florituras literarias y utilizar un lenguaje neutro y práctico. Y, sobre todo, ser concisos, centrarnos solo en el esqueleto argumental y pasar de puntillas por las subtramas o la personalidad de los personajes (para esto último se puede incluir después un glosario de personajes describiendo las particularidades de cada uno). Pero la sinopsis argumental se debe centrar, como su nombre indica, en la trama principal y en cómo se desarrolla la acción.

alt="sinopsis argumental, el espíritu del lince, javierpellicerescritor.com"

La base para crear una sinopsis argumental la utiliza todo autor cuando proyecta una historia: planteamiento, nudo y desenlace. Probablemente, antes de sentarte a escribir tu novela, has tomado notas sobre cómo querías que se desarrollara la historia, creando un resumen esquemático. Ahora puedes volver a hacerlo, pero basándote en la obra ya terminada, y convirtiéndolo en un texto coherente y sólido. Se puede seguir esta estructura típica para elaborar el resumen, evitando perderse en detalles superfluos y poniendo especial énfasis en el clímax y el papel de los personajes en este (y en el resto de la historia, por supuesto). Por desgracia, esto lleva a desvelar aspectos de la trama (spoilers), algo que con la sinopsis habitual está terminantemente prohibido. Pero este resumen no tiene como destinatario el lector común, sino el editor (o agente literario, o lector editorial). Su función es servir de guía para que el editor tenga una visión global de la estructura y la historia con el detalle necesario para valorar las posibilidades de la obra en su conjunto. De este modo sabrá si debe dar el siguiente paso: leer la novela completa.

Resumiendo, estos son los puntos principales de una sinopsis argumental:

·Narrar la sucesión de acontecimientos principales que dan forma a la historia, desde el planteamiento hasta el desenlace, y qué motiva la acción.

·Evitar perderse en las subtramas (como mucho mencionarlas).

·Dejar claro el papel de los protagonistas en la historia, dando unas ligerísimas pinceladas de su personalidad.

·Ceñirse a la trama, no a aspectos literarios.

·No perder el tiempo en descripciones.

·Dejar claro el “cómo-cuándo-dónde” (contexto).

·No temas incluir spoilers.

·Dos o tres páginas de extensión (aunque puede variar por exigencias de cada editor)

·Mostrarse neutral en la narración, y jamás emitir juicios de valor.

Todos estos condicionantes pueden parecer complicados de manejar, pero todo se resume a una cuestión de práctica. Mi consejo es que el autor se acostumbre a realizar una sinopsis argumental de todas sus obras, la mueva o no la mueva entre editoriales, o incluso si no se la piden. De este modo, compañero escritor, aprenderás a sintetizar, una habilidad que te resultará muy útil para un sinfín de situaciones. En cualquier caso, el esmero que debes poner en la creación de la sinopsis argumental debe ser mayúsculo, si pretendes causar un buen efecto en el editor.

En el próximo artículo de la serie, y cada vez más cerca del final, hablaremos de otra parte del material que debemos remitir al editor, los extractos, y de qué criterios valerse para elegirlos.

SI TE HA GUSTADO EL ARTÍCULO, COMPÁRTELO

Anuncio publicitario
Estándar

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.