¿Qué sería de la edición española de la saga «Canción de hielo y fuego» sin las ilustraciones de cubierta de Enrique Corominas? ¿Y no son auténticas obras de arte las portadas de Alejandro Colucci, Manuel Calderón o A.J. Manzanedo? Nos atrapan la vista, nos tientan a abrir las tapas y adentrarnos en la lectura. Son el anzuelo decisivo para atrapar al lector y predisponerlo a vivir una gran experiencia. Son las portadas, y pueden significar la diferencia entre el éxito o el fracaso de un libro. Ya hemos hablado del trabajo del ilustrador en otras ocasiones, como en la entrevista con la portadista Carolina Bensler, pero hoy abordaremos las claves de esa portada perfecta que decidirá en buena parte el futuro de una obra literaria. Y, por primera vez, será un articulista invitado quien lo haga, un profesional: Emiliano Molina, responsable de DPortadas, una nueva empresa de servicios literarios enfocados precisamente en el diseño de portada y maquetación dirigido a autores independientes. ¿Cómo debe ser una portada? ¿Qué factores hay que tener en cuenta? A continuación tendréis todas las respuestas: Sigue leyendo